Con motivo del Día Internacional de la Niña en la Ciencia, celebrado el pasado Domingo 11 de febrero; desde Programa Despierta queremos dedicar unas líneas a todas estas niñas con altas capacidades que persiguen sus sueños científicos.
Es por todos sabido que; tradicionalmente, hay una serie de sectores del mercado laboral que han estado reservados para los hombres y otros para las mujeres. Sin embargo, teniendo en cuenta los tiempos que corren, es fundamental que estas líneas que separan unas carreras profesionales de otras se difuminen. Es necesario que todas las personas, sin importar su sexo o género, se dediquen profesionalmente a aquello que les apasiona.
Este es uno de los objetivos que guía nuestras intervenciones con los niños y niñas con altas capacidades. Descubrir cuáles son sus pasiones y trabajar con ellos y ellas para que puedan conseguirlas.
Estas carreras profesionales en las que las mujeres hemos estado subrepresentadas son las llamadas “Carreras STEM”. Es decir, ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
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En España, durante el pasado curso académico 2016-2017, los y las estudiantes de nuevo ingreso a carreras universitarias se dividían así por ramas de enseñanza:
Mujeres | Hombres | |
Ciencias Sociales y Jurídicas | 59% | 41% |
Ingeniería y Arquitectura | 23% | 77% |
Artes y Humanidades | 60% | 40% |
Ciencias de la Salud | 70% | 30% |
Ciencias | 49% | 51% |
Fuente: Ministerio de Educación, Cultura y Deporte |
Podemos ver que las mujeres tenemos una presencia mucho mayor que los hombres en las ramas de Ciencias Sociales y Jurídicas, de Artes y Humanidades y de Ciencias de la Salud. Sin embargo, y a pesar de que se haya aumentado la presencia de mujeres en la rama de Ciencias (biología, bioquímica, matemáticas, física, química…); aún hay una gran minoría de mujeres que estudia carreras de la rama de Ingeniería y Arquitectura. Desde Programa Despierta queremos ayudar a que esta cifra del 23% aumente, llegando a poder equipararse a la de los hombres.
Razón 1. Todavía hay un gran prejuicio de género en el entorno educativo que relega a las niñas con altas capacidades a las carreras de Ciencias Sociales y Jurídicas y de Humanidades. Estos prejuicios, generalmente sutiles e inconscientes, sobre las habilidades matemáticas o científicas de las mujeres, los tienen maestros, compañeros, profesores… Se cree que las mujeres trabajan duro, pero no son tan brillantes como los hombres, por lo que se duda que puedan destacar en estas áreas.
Razón 2. Las niñas, por regla general, son más sensibles que los niños. Esta sensibilidad puede causar efectos negativos sobre sus estudios en matemáticas. Muchas veces, se añaden presión a sí mismas por creer que no podrán resolver un problema matemático. En muchos casos, esta presión añadida hace que las niñas con altas capacidades no demuestren su desempeño real en matemáticas. Lo que nos lleva a la siguiente razón:
Razón 3. Falta de confianza en sus propias habilidades. Además, las niñas con altas capacidades tienden a atribuir su éxito a la suerte o al esfuerzo, y asocian el fracaso o los errores a la falta de habilidad o a algún defecto interno. Del mismo modo, su afán por alcanzar la perfección hace que puedan frustrarse con facilidad.
Razón 4. Las niñas con altas capacidades, cuando son pequeñas, no practican juegos que mejoren sus habilidades espaciales, por lo que no las desarrollan al mismo tiempo que los niños.
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Ahora bien, ¿qué podemos hacer para que las niñas con altas capacidades persigan las carreras STEM? Es esencial que las niñas con altas capacidades sientan que lo que están haciendo les apasiona y que tenga un significado para ellas. De esta forma, desarrollarán un compromiso hacia la consecución de objetivos académicos y profesionales; y este compromiso les acompañará a lo largo de sus vidas.
Además, teniendo en cuenta la sociedad en la que vivimos, en la que se están dando pasos a favor de la consecución de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, resulta necesario que todas las personas, independientemente de nuestro sexo o nuestro género, luchemos por nuestros sueños y nos dediquemos a aquello que nos apasiona. Es necesario difuminar las líneas que separan unas carreras profesionales de otras. Es preciso que nuestras niñas con altas capacidades interesadas por las carreras STEM sean las mejores ingenieras, arquitectas, matemáticas, científicas… de su generación. Y el equipo de Programa Despierta se compromete a ayudar a todas estas niñas con altas capacidades cuya pasión sea la ciencia.
Autora: Patricia Beltrán Pérez
Especialista en Altas Capacidades – Programa Despierta Dénia